La dispensa afecta específicamente a la propuesta, no necesariamente a todo el proceso de negociación. Esta distinción es crucial, ya que limita la revelación a lo estrictamente necesario para la finalidad procesal: conocer qué se propuso concretamente y fue rechazado. Las conversaciones preliminares, las estrategias negociadoras, las motivaciones de las partes y otros aspectos del proceso MASC permanecen protegidos por la confidencialidad.